Hoy podemos afirmar de forma indiscutible que los tiempos están cambiando y dichos cambios son cada vez más rápidos y más drásticos. 

Uno de los mayores y más importantes cambios que estamos experimentando a nivel mundial, es el advenimiento de un nuevo orden plenamente globalizado, en el que las mujeres están tomando el poder.

 

 

Cabe mencionar que la cuestión no está en que se les esté entregando dicho poder, sino que son ellas mismas quienes están asumiendo y tomando lo que es su derecho: El poder total y absoluto de dirigir el mundo. 

Ese poder que van asumiendo definitivamente les pertenece por derecho. Está claro, y así lo demuestran las nuevas generaciones, que la instauración de un nuevo orden mundial basado en la Ginarquía “Es Imparable”. 

Pero además, hoy en día las mujeres desde niñas saben que ostentan ese derecho, y no solamente lo quieren sino que vislumbran un futuro en el que asumido su poder, lo ejercerán en todos los ámbitos de la vida. 

El día en que eso suceda,  los hombres estaremos en donde nos corresponde; sometidos a las mujeres, al ser superior al que nos debemos y queremos servir. 

El hombre, ser inferior al femenino, no puede sentir más intenso placer, que el placer de complacerlas. 

Es de sumisos bien nacidos, acabar esclavos agradecidos. 

Este orden mundial ya está llegando, se ve venir  y es imparable.

Mientras llega el momento en que las mujeres decidan tomar el control total, nosotros los hombres deberemos esperar pacientes, obedeciendo sumisos a los avances que las mujeres van imponiendo día a día.

Nosotros hombres sumisos debemos colaborar en la educación de nuestros iguales. Debemos ayudarlos a comprender y aceptar gustosos y con naturalidad el maravilloso cambio que viene. 

 

Disfrutemos de este momento histórico que está por llegar y aceptemos que es un cambio necesario para el mundo.

¡La supremacía femenina al poder!